Me tocó lidiar una mañana de playa pero al atardecer pude disfrutar de una visita fugaz a los Urros de Liencres (Costa Quebrada) en donde coincidí con bastantes fotógrafos que por allí andaban dando vueltas a ver por donde le metían mano al tema...
No faltó la visita obligada al parque natural de Cabárceno que nos costó una pasta y la verdad es que no mereció la pena porque fuímos tarde y hacía un bochorno que a duras penas vimos animales
La foto la tomé desde un mirador del parque donde se pueden ver las peculiares formaciones geológicas del lugar y su maravilloso entorno.
Visitamos a toda mecha las poblaciones más emblemáticas de la zona como Comillas o San Vicente de la Barquera y sin duda alguna el lugar que más me cautivó fue Santillana de Mar.
Su impactante estilo medieval, sus calles empedradas y sus fachadas repletas de decenas de macetas con floridos geranios me parecieron de lo más fotogénico. Lástima no haber tenido un día nublado para hincharme a hacer fotos porque el sitio bien lo merecía.
En la foto: Claustro de Santa Juliana y la familia con el perro de marras en Santillana de Mar.
Y ese mismo día, después de un buen hartón de coche y caminar por calles, plazas y callejuelas, decidímos acercarnos a ver el bello Parque Natural Saja Besaya que no pillaba precisamente a la vuelta de la esquina pero que bien mereció la pena visitar.
Lástima ir siempre con poco tiempo y con la presión de la familia que se "aburre" viendo como me pierdo por la espesura con la cámara, jeje.
