Esta es una foto del invierno pasado (2010) y la tengo mucho cariño por todo el trabajo que hay detrás y por el éxito que tuvo en su día cuando la subí a Fotonatura. Los detractores de la fotografía de estudio critican éste tipo de imágenes por la artificialidad de los resultados obtenidos, pero a mi personalmente me encanta tal artificialidad y creo que el impacto visual de éste tipo de imágenes es difícil de conseguir de otro modo.